1.4 El avance de la aviación comercial.


El desarrollo de los inventos con relación a los automóviles y los aviones está asociado con la tecnología y el desarrollo social de los pueblos, pues han servido de intercambio entre estos.
El avión comercial que pertenece a una empresa privada y presta sus servicios ya sea de pasajeros o de carga, ha servido a lo largo de la historia para transportar todo tipo de mercancía y de personas para fines comerciales, vacacionales, de negocios, entre otros.
Los primeros aviones comerciales comenzaron en 1910 pero su surge se desarrolló en Europa después de la primera guerra mundial, debido a que muchos caminos y vías ferroviarias estaban destruidas por la guerra y el único medio de transporte que podía atravesar Europa de un país a otro era el avión; en los años treinta, las aerolíneas funcionaban con ayuda del gobierno y volaba desde Europa hacia medio oriente, África, Asia y Latinoamérica.




En los años 60 el futuro de la aviación era emocionante: aviones o dirigibles gigantes de carga, veloces aparatos supersónicos de pasajeros con todas las comodidades y no poca elegancia e incluso vehículos hipersónicos capaces de llevar centenares de viajeros entre Londres y Sydney o entre Nueva York y Hong Kong en apenas tres horas. Pero luego vino el 'shock' del petróleo, las crisis económicas y la era del punk, y los sueños de la velocidad y el estilo dejaron paso a la necesidad de la eficiencia.


Los avances en materiales y estructuras permiten imaginar nuevas formas, al mismo tiempo que los límites de las configuraciones actuales obligan a pensar en diseños nuevos. La revolución de las fibras sintéticas como principal material estructural apenas acaba de empezar con aparatos como el Airbus A-350 y el Boeing 787 Dreamliner demostrando que la fibra de carbono puede reemplazar al aluminio en los esquemas actuales; futuras generaciones explotarán las características de estos materiales con formas menos ortodoxas y configuraciones más originales.





Los avances en motores eléctricos y baterías de alta capacidad de almacenamiento y bajo peso permitirán crear aviones eléctricos, e incluso solares. Pero antes, nuevas generaciones de motores a reacción todavía más eficientes y usando biocombustibles harán de puente para la transición. 

Y los avances en electrónica e informática modificarán tanto el pilotaje como la experiencia del viaje aéreo. Más lejos, más barato y más verde son las reglas del juego.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

CENTRO UNIVERSITARIO OPARIN     Investigación pedagógica IV Juan Jesús León Salazar  Cuarto Semestre ...